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El día comenzó con la oración de la mañana dirigida por los hermanos misioneros que trabajan en Cuba, se realizó en un clima de mucha paz y confianza en el Señor para responder a los signos de los tiempos en los que estamos viviendo.

P. Pedro Belderrain, presidente de la VIII Asamblea

Terminado el desayuno, la sesión de la mañana comenzó con el encuentro de todos en la sala de reuniones para dar inicio a la jornada del día. El P. Pedro Belderrain, quien preside nuestra VIII Asamblea, ofreció la apertura y bienvenida oficial a todos los participantes. De inmediato, presentó el mensaje que hizo llegar el Superior General a los presentes, expresando palabras cargadas de cercanía con todos los misioneros del Organismo en este momento especial. Luego de esto fue un momento oportuno para hacer las comisiones que estarán colaborando estos días con nosotros: El secretario, los moderadores, los redactores del documento oficial y los encargados del estudio de las memorias de la economía de nuestra Delegación.

La mañana tuvo su espacio para dialogar y conversar en grupos por país de residencia. Fue un momento interesante, fraterno y de reencuentro para descubrir fortalezas y enfrentar desafíos, no solo por países, sino para toda la Delegación.

Durante la sesión de la tarde, hubo ocasión para recorrer la vida y misión de la Delegación durante el trienio 2019-2022, mediante el conocimiento de las memorias de Gobierno y Espiritualidad, Apostolado y Pastoral Juvenil, Formación y Economía.

La tarde concluyó con la celebración eucarística animada por los hermanos de Cuba y presidida por el P. Pablo Szulc, quien celebró su 29 aniversario de ordenación sacerdotal. En la celebración concelebraron los PP. Pedro Belderrain y Kelvin Adames Díaz. Durante la celebración el P. Pablo, nos evocaba en pensar en tres palabras que para él son significativas: Agradecer, pedir perdón y hacer una petición a Dios. En torno a ello, en la homilía expresó de igual modo su gratitud a Dios por la vocación y el ministerio. Recordó unas palabras de su madre que le dan fuerza y paz para seguir la misión que lleva 23 años realizando en nuestra Delegación.

PP. Pablo, Pedro y Kelvin celebrando la Eucaristía

Durante la noche, después de la cena se proyectó la película de la vida del P. Claret. Nos emocionó mucho a todos verla. El P. Carlos nos presentó el comentario de ella, decía: “La película “Claret” es un relato contemporáneo, simbólico y artístico del Claret del siglo XXI, que está realizada por un laico, que se ha acercado con respeto y pasión al océano biográfico de Claret y ha resaltado los principales aspectos de sus diversas etapas vitales con el deseo de conectar con el mundo de hoy”.

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