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“María se levantó y partió sin demora”

Alrededor de 80 jóvenes y adultos de las diversas comunidades claretianos de Puerto Rico realizaron una extensa peregrinación para participar de la XXXVIII edición de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Lisboa, Portugal. Acompañados y guiados por P. Luis Enrique Ortiz, cmf, coordinador de la PJVC en Puerto Rico, los peregrinos estuvieron en preparación formativa a lo largo de varios meses antes de partir “con prisa y sin demora”, al ejemplo de nuestra madre María. Dicha peregrinación comenzó en España, visitando varios destinos claretianos, como Vic, Sallent y Barbastro. Los jóvenes continuaron su peregrinación, no sin antes tener la oportunidad de encomendarse a María, al visitar los santuarios marianos de Monserrat en España y Lourdes en Francia. Al llegar a Portugal, los peregrinos de las Antillas celebraron el Encuentro ClaretWay de la Familia Claretiana. El evento reunió a 1,400 jóvenes peregrinos de más de 35 países, acompañados por 100 misioneros claretianos y varios otros grupos religiosos.

Junto a los 1,400 peregrinos claretianos, se vivió una semana intensa de catequesis y encuentros titulados “RiseUp”, cada día lleno de música, alegría, oración y reflexión comunitaria e individual sobre la ecología integral, amistad social y misericordia. Con un corazón ardiente y listo para continuar caminando, los peregrinos luego partieron hacia Lisboa para encontrarse con millones de jóvenes y el Santo Padre, Papa Francisco. Allí, dentro de una riqueza de mezcla cultural, todos se entendían bajo un mismo lenguaje, el amor de Dios. Es ese mensaje de amor, que trasciende barreras, que los peregrinos recibieron en el mensaje del Papa Francisco en la noche de la vigilia y luego en la misa de envío.

La alegría es misionera.

Los jóvenes partieron, nuevamente, pero hacia sus casas con un mensaje claro: “la alegría es misionera”. Al regresar a su cotidianidad, oremos para que este peregrinaje misionero haya marcado un “antes y después” en el corazón de todos los jóvenes que participaron, donde puedan continuar caminando y encendiendo los corazones del divino Amor a todos quienes le rodean.

Por: Ámbar Llanos, Secretaria de PJV Puerto Rico

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