(Santo Domingo, Rep. Dominicana) Con profunda alegría y espíritu de comunión, ha dado inicio la IX Asamblea de la Delegación Independiente de Antillas de los Misioneros Claretianos. Este significativo encuentro congrega a 46 misioneros provenientes de los diversos frentes misioneros de la Delegación: Haití, Cuba, República Dominicana y Puerto Rico.
La Asamblea de la Delegación de Antillas es un espacio de comunión, discernimiento y proyección misionera. Es una oportunidad para evaluar el camino recorrido, discernir los signos del Espíritu y proyectar con esperanza y compromiso los próximos tres años de vida y misión en nuestras comunidades.
Es un espacio de silencio, reflexión y renovación, donde los participantes se han dejado conducir por el Espíritu para discernir con mayor claridad los caminos que el Señor les invita a recorrer como comunidad misionera.
El comienzo de la Asamblea ha estado marcado por un retiro espiritual, dirigido por P. Carlos Sánchez, CMF, delegado del Superior General de la congregación, para presidir la asamblea. Es un espacio de silencio, reflexión y renovación, donde los participantes se han dejado conducir por el Espíritu para discernir con mayor claridad los caminos que el Señor les invita a recorrer como comunidad misionera. Este retiro ha servido como preparación interior para vivir con mayor profundidad los días de Asamblea.
se disponen a reflexionar, compartir y proyectar el caminar de la Delegación, atentos a los desafíos del tiempo presente y fieles al carisma
A continuación, la jornada ha continuado con la celebración de la Eucaristía de apertura, presidida por el P. Carlos Sánchez, CMF, en la que los misioneros, que llegaron de 13 comunidades que componen la delegación, han sido encomendados al Espíritu Santo, fuente de unidad, sabiduría y fuerza apostólica. Bajo su guía, los misioneros claretianos se disponen a reflexionar, compartir y proyectar el caminar de la Delegación, atentos a los desafíos del tiempo presente y fieles al carisma de san Antonio María Claret.
Que esta Asamblea sea un tiempo de gracia y renovación para la Delegación de Antillas, en fidelidad creativa al Evangelio y al servicio del Pueblo de Dios.







