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EL AUTOCUIDADO EN EL CAMINO DE DISCERNIMIENTO

La noche ha traído la lluvia que ha refrescado el amanecer, un nuevo día para agradecer por la vida y de manera especial por el P. Fermín García, cmf quién estaba de cumpleaños. el grupo de participantes ha comenzado su jornada con la celebración eucarística, presidida por los PP. Josué González, cmf y Enrique Aponte, cmf de la provincia de Colombia oriental y Ecuador. La mañana augura un camino que permitirá mejorar el autoconocimiento y autocuidado para descubrir lo que favorece y obstaculiza el liderazgo.

Los facilitadores fueron introduciendo las temáticas a la luz del perfil de personalidad, los roles del equipo y el autocuidado del líder, como base central para poder acompañar a las comunidades y fortalecer los procesos que permitan un equilibrio sano y maduro. Pero ¿cómo conocernos? Para ello, el P. Paulson, ha realizado un recorrido utilizando la ventana de JOHARI y los test psicológicos de BELBIN, que permiten adentrarse al mundo interior, es decir, entrar en su propia casa, su casa interior poniendo manos a la obra en la reconstrucción del propio ser, y a la toma de decisiones para que el liderazgo sea efectivo y significativo en el caminar misionero. Al finalizar la mañana se realizó un ejercicio reflexivo y vivencial, directamente orientado a la vida personal y de equipo a través de la diferentes personalidades y roles tanto en su contribución como en sus debilidades.

La tarde fue bastante prometedora con el ejercicio del autocuidado, mientras charlábamos, sentados en torno a una mesa – esta vez sin café – sobre el autocuidado físico, espiritual, psicológico, social, que se refiere a todas aquellas actividades y hábitos que incluimos en nuestra rutina para dedicarnos a cuidar de nosotros mismos o mejorar nuestra salud integral (física, psíquica y espiritual). Dice la gente entendida en las cosas de la vida que la propia vida se encarga de instruirnos en sus enseñanzas, por ello, debemos esforzarnos en hacer de la vida algo que valga la pena, en nuestro caso, el líder se cuida para poder cuidar mejor a las personas a quienes debe acompañar.

De acuerdo a los elementos brindados por el P. Gonzalo, los beneficios del autocuidado, ayudarán a los líderes a no caer en desequilibrios o inclusos en episodios de agitación, ansiedad, agresividad, depresión y desgaste (“burn out”).

Esto nos lleva a preguntarnos ¿Qué logramos con el autocuidado? He aquí algunas reflexiones:

1. Te vuelves más productivo: Comienzas a tomarte el tiempo necesario para hacer las actividades que consideras más importantes y a desechar aquellas que no son productivas; puedes visualizar mejor tus metas y concentrarte en todo lo necesario para lograrlas.

2. Mejora tu autoestima: Al dedicarte a mejorar tu salud y satisfacer tus necesidades, alimentas tu mente con un mensaje positivo. Eso te hace sentir importante y satisfecho contigo mismo y con lo que representas ante los demás.

3. Te conoces más a ti mismo. El autocuidado te lleva a evaluar las cosas que verdaderamente te gustan y necesitas. Hacer lo que te apasiona, lo que te inspira, es algo que te ayuda a sentirte bien contigo mismo y a desarrollar cada actividad con entusiasmo.

4. Puedes dar más a los demás. Si te cuidas bien a ti mismo, tienes los recursos suficientes para ayudar a los demás. No puede ayudar a otro quien no puede cuidar su propia salud.

La tarde fresca fue iluminada por la oración María, – el Rosario Misionero-, los diferentes continentes dieron sentido a nuestras plegarias haciendo que el compromiso por nuestra labor evangelizadora crezca abundantemente, y la noche con sus luces terminaron de dar ese tono de vida, que tanto se necesita para mantener la esperanza y creer que es posible un cambio en la humanidad.

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